¿Está realizando la reforma de cocinas? ¡Lea esto!
Antes de embarcarse en la remodelación, consulte nuestra lista de estrategias para gastar con inteligencia y conseguir la cocina que desea, dentro de su presupuesto.
Estrategias de gasto inteligente para la reforma de cocinas
La cocina es la habitación más cara de remodelar, e incluso las mejoras cosméticas (pintar los armarios y las paredes existentes, sustituir el fregadero, el grifo y los herrajes, añadir iluminación colgante y actualizar la electricidad) pueden costar 5.000 dólares o más.
Si se derriban paredes, se reorganiza la distribución, se compran nuevos electrodomésticos, armarios y encimeras, el precio de la reforma de la cocina puede dispararse a 40.000 o 50.000 dólares o más.
Así que, antes de contratar a un profesional o de empezar a hacer el trabajo usted mismo, lea nuestros consejos para gastar con inteligencia -desde actualizaciones sencillas hasta una renovación total- y consiga la cocina que desea y que se ajuste a su presupuesto.
- Pinte y ahorre en armarios
Los nuevos armarios pueden suponer entre el 30% y el 40% de los costes de reforma de cocinas. Así que si está contento con su ubicación y funcionalidad, pero el acabado es oscuro o aburrido, considere la posibilidad de pintarlos en lugar de sustituirlos.
Es un proyecto de bricolaje bastante laborioso, pero factible, y su cartera se lo agradecerá. Incluso contratar a un profesional de la pintura le costará una fracción de los nuevos armarios a medida.
Consejo de estilo: Para obtener un aspecto fresco y aireado, retire las puertas de algunos armarios superiores para crear estanterías abiertas.
- Gasta en una grifería de calidad
El grifo es la parte que más trabaja en la cocina, así que apuesta por la calidad y la comodidad, es decir, por una marca de primera calidad y un funcionamiento monomando.
Si su fregadero está frente a una ventana, asegúrese de comprobar las distancias entre el grifo y el mando para asegurarse de que encaja (y de que no se golpeará los nudillos con el alféizar).
A la hora de elegir un fregadero que lo acompañe, lo mejor es lo sencillo: Elige una sola pila, tan grande como puedas, y no más profunda de 10 pulgadas para que no te veas obligado a agacharte para lavar los platos.
- Prepárese antes de pintar
Tanto si lo haces tú mismo como si quieres vigilar a tu pintor, estos consejos te ayudarán a hacerlo bien.
El brillo del acabado influye en la facilidad de limpieza; opte por el semibrillante en todas las molduras, el satinado en los armarios pintados y la cáscara de huevo en las paredes.
Prepáralo antes de coger la brocha; ninguna pintura o imprimación cubrirá las paredes agrietadas o los agujeros de los clavos en las molduras. Lija las zonas irregulares, rellena los agujeros de los clavos y calafatea todas las juntas. Y si ha contratado a un equipo, asegúrese de que su contratista aclare quién es el responsable de hacer ese trabajo.
El mejor momento para pintar la cocina es antes de lo que crees: Hágalo antes de colocar los armarios y el panel trasero en las paredes para reducir los costes de mano de obra (incluso después de una ronda extra de retoques), eliminar los goteos de pintura en los armarios y azulejos, y asegurar una línea perfecta donde se unen a la pared.
- Tenga en cuenta el carácter y la funcionalidad a la hora de elegir un salpicadero
Piensa en la sección de la pared entre la encimera y los armarios como un lienzo donde puedes expresar tu personalidad. Los azulejos de fondo ofrecen un aspecto tradicional, a menos que sean de gran tamaño, los coloque verticalmente o los disponga en un patrón de espiga.
Los pequeños mosaicos son bonitos, pero las líneas de lechada son más difíciles de limpiar. Por supuesto, hay muchas otras opciones, como el cristal, el metal, la piedra, el mosaico, la cerámica en relieve y otros azulejos, y otras opciones no relacionadas con los azulejos, como los paneles de madera o los azulejos metálicos del techo.
Elija algo que refleje su gusto, pero que también sea ampliamente atractivo y fácil de mantener para que no desanime a los compradores cuando ponga la casa en el mercado algún día después de su reforma de cocinas.